Se cree que los pacientes con diabetes tienen un mayor riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer, además de tener un mayor riesgo de desarrollar una recurrencia de cánceres diagnosticados previamente. Por ejemplo, un mayor riesgo de recurrencia de cáncer de mama, específicamente, se ha relacionado con la obesidad y la diabetes en las mujeres. Entre otras explicaciones posibles, se cree que los niveles elevados de insulina actúan como un estímulo para que las células cancerosas crezcan y se dividan. Otras moléculas asociadas a la diabetes también parecen causar un aumento de la proliferación o crecimiento de las células cancerosas, incluido el factor de crecimiento similar a la insulina (IGF).
La metformina, también conocida como Glucophage, se ha convertido en el medicamento oral más comúnmente recetado para el tratamiento de la diabetes. Estudios previos de laboratorio y salud pública han sugerido que la metformina también puede ser capaz de suprimir la proliferación de células cancerígenas y reducir el riesgo de muerte debido al cáncer. Sin embargo, hasta ahora, ha habido muy poca evidencia de investigación clínica directa disponible para apoyar esta hipótesis.
Un nuevo estudio de investigación clínica, recién publicado en el Journal of Clinical Oncology, arroja más luz sobre el posible papel de la metformina como un posible nuevo tratamiento para el cáncer de mama. En este estudio clínico retrospectivo del MD Anderson Cancer Center, se revisaron las historias clínicas de 2.529 pacientes que recibieron quimioterapia como tratamiento inicial (quimioterapia neoadyuvante) para sus cánceres de mama en etapa inicial, entre 1990 y 2007. Este grupo de pacientes con cáncer de mama incluyó a 68 pacientes diabéticos que tomaban metformina, 87 pacientes diabéticos que no estaban tomando metformina y 2.374 pacientes no diabéticos. Todos los 2,529 pacientes recurrieron repetualmente a cirugía para sus cánceres de mama, y los investigadores luego evaluaron la respuesta del cáncer de mama de cada mujer a su quimioterapia inicial.
Se produce una respuesta patológica completa a la quimioterapia cuando el patólogo ya no puede encontrar ninguna evidencia de cáncer residual después de la extirpación quirúrgica del sitio original del cáncer. (En general, una respuesta patológica completa a la quimioterapia neoadyuvante se asocia con un mejor pronóstico). La incidencia de la respuesta patológica completa a la quimioterapia neoadyuvante se evaluó luego en cada uno de los tres grupos de mujeres involucradas en este estudio clínico.
En este estudio, se encontró que las mujeres diabéticas que estaban tomando metformina tenían una tasa de respuesta patológica completa tres veces mayor a la quimioterapia neoadyuvante en comparación con las mujeres diabéticas que no tomaban metformina (no hubo diferencias estadísticamente significativas entre los diabéticos las mujeres que tomaron metformina y las mujeres no diabéticas, aunque todavía existía una tendencia hacia una mejor respuesta patológica completa en el grupo de metformina).
Si bien la naturaleza retrospectiva de este estudio, y el número relativamente pequeño de mujeres diabéticas incluidas en el estudio, limita significativamente las conclusiones que se pueden extraer, estos resultados son consistentes con otros hallazgos de investigaciones anteriores. Tomados en conjunto, estos datos sugieren que la metformina puede, como mínimo, contrarrestar los efectos proliferativos de la diabetes en las células de cáncer de mama. Este hallazgo plantea la pregunta de si las mujeres diabéticas que son diagnosticadas con cáncer de seno deben someterse rutinariamente a la metformina como parte de su programa general de tratamiento del cáncer. Dado que este estudio clínico también detectó una mejoría no significativa en las tasas de respuesta patológica completa entre las mujeres diabéticas que toman metformina, en comparación con las mujeres no diabéticas, los estudios prospectivos más amplios de investigación clínica también pueden ayudarnos a entender si la metformina podría ser clínicamente útil en el tratamiento de la mama cáncer en mujeres que no tienen diabetes, también.
Actualmente, hay varios ensayos prospectivos de investigación clínica en curso, que analizan el papel de la metformina en el tratamiento del cáncer de mama (y al menos uno de estos ensayos clínicos para el cáncer de próstata, también). Afortunadamente, uno o más de estos ensayos de investigación clínica prospectivos nos ayudarán a comprender mejor el papel, si lo hay, para la metformina como una terapia potencial contra el cáncer de mama en mujeres diabéticas (y, a veces, también en mujeres no diabéticas). Mientras tanto, si usted es una sobreviviente de cáncer de mama con diabetes y no está tomando metformina, es recomendable que discuta estos datos con su oncólogo.