El cáncer de ovario no se publicita tan ampliamente como el cáncer de mama, por lo que muchas personas se quedan buscando en línea y a través de libros para obtener más información sobre los síntomas, las tasas de supervivencia, las señales de advertencia y las etapas. Este artículo analizará la puesta en escena y explicará qué significa cada una de ellas.
Etapa 1: Por supuesto, esta es la forma más temprana de cáncer. En esta etapa, el cáncer se encuentra en uno o ambos ovarios. Se divide además en las siguientes subetapas.
1A: 1 ovario involucrado, sin ascitis (fluido en el abdomen), sin tumor en la superficie externa.
1B: Ambos ovarios implicados, sin ascitis, sin tumor en la superficie externa.
1C: el cáncer está presente en uno o ambos ovarios, pero con un tumor en la superficie, ascitis, células malignas en el líquido o en el interior del abdomen.
Etapa 2: Esta etapa también se considera temprano. La mayoría de los diagnósticos se realizan en las etapas 3 y 4. Uno o ambos ovarios están involucrados, pero el cáncer se ha diseminado a otras regiones pélvicas.
2A: extensión al útero y / o tubos.
2B: uno o ambos ovarios y extensión a otros órganos pélvicos.
2C: Igual que 2A o 2B pero con la adición de tumor en la superficie de uno o ambos ovarios, rotura de la cápsula o ascitis.
Etapa 3: Tumor de cáncer que afecta a uno o ambos ovarios con extensión al abdomen.
3A: uno o ambos ovarios y extensión a un área pequeña del abdomen.
3B: metástasis o extensión al peritoneo o revestimiento de la cavidad abdominal.
3C: Cáncer en uno o ambos ovarios, extensión al peritoneo, afectación de los ganglios linfáticos.
Etapa 4: Estadio más avanzado de la enfermedad. Metástasis a distancia a otras partes del cuerpo más allá del abdomen como el hígado y los pulmones.
El diagnóstico de cáncer de ovario generalmente se realiza en las últimas etapas debido a los síntomas inespecíficos de la enfermedad. Los estudios han demostrado que solo aproximadamente el 20% se diagnostican en la etapa I, el 5% en la etapa II, el 58% en la etapa III y el 17% en la etapa IV. Controles de rutina y estar alerta de los primeros signos y síntomas son la clave.